miércoles, 21 de enero de 2015

PROGRAMAS DE AUSTERIDAD ILEGALES


La Troika, creada en 2010, está compuesta por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). De la misma forma que los dos últimos imponen programas de ajuste estructural, la Troika dicta medidas de austeridad en violación de los derechos de los pueblos.

Los primeros ajustes de la Troika se han dado en los pueblos griego, portugués, irlandés, chipriota y español. Debido a la situación financiera de estos países, la Troika, aprovechando su posición de fuerza, les ha impuesto lo que se les llama "memorandums": programas con una lista de medidas de austeridad (despidos de funcionarios,  disminución de los presupuestos sociales, aumento de los impuestos indirectos, bajadas de salarios, etc) que los gobiernos debían aplicar para poder acceder a los préstamos de la Troika.

El profesor de derecho Andreas Fischer-Lescano, comisario por la Cámara de Trabajo de Viena demuestra que "los programas de la Troika son ilegales en virtud del derecho europeo e internacional. Estos memorándums violan una serie de derechos fundamentales como el derecho a la sanidad, a la educación, a la vivienda, a la seguridad social, a un salario justo, a la propiedad privada, pero también el derecho a la libertad de asociación y de negociación colectiva". Todos estos derechos son protegidos por muchos textos jurídicos como: la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, la Convención Europea de los Derechos del Hombre, la Carta Social Europea, los Dos Pactos de la ONU sobre los Derechos Humanos, la Carta de la ONU...

La Troika (que está obligada a respetar y también de proteger los derechos humanos : es decir evitar que terceros cometan esas violaciones) y los Estados no pueden utilizar esta crisis como excusa para suspender sus obligaciones de proteger los derechos humanos.

Una economía sin sentimientos


¿De verdad la economía no puede estar unida a la moral? Esta ciencia irrumpe continuamente en nuestras vidas cada minuto, cada segundo que pasamos en este mundo. Nos crea dependencia, a unos los destruye y a otros los ayuda. A algunos los corrompe y quitan toda la ayuda a los que la necesitan. Al igual que la economía, la moral forma parte continua de nuestra vida y este es uno de los factores que hace que la economía sea una ciencia impredecible.
Hoy en día se antepone la mejora de la producción y el capital a las vidas de los ciudadanos con la excusa de hacer crecer el país. Con la globalización se ha creado una competencia infinita que nos hace buscar los costes de producción más baratos posibles para poder seguir siendo competentes a nivel mundial. ¿A qué precio se paga esto?.
Por un lado se encuentran los paises explotados o, mejor dicho, los paises con los bienes necesarios y sus trabajadores explotados. Hay dos formas de jugar con ellos: aprovechando la fuerza de nuestra moneda sobre la suya o aprovechando el nivel de explotación existente en el pais o los bajos salarios de sus empleados. También esta la opción de invadir, una práctica frecuente de los Estados Unidos.
Por otro lado se encuentra el propio país, donde se le da la espalta a los productos "demasiado caros" que crean sus propios ciudadanos utilizando la materia prima que les corresponde por el lugar donde viven sin necesidad de la explotación de otras personas. En la cara de la moneda están las grandes multinacionales que se pueden permitir crear sucursales en cualquier parte del mundo buscando el mínimo coste posible para seguir creciendo. Seguir creciendo. Hacer crecer el país. Dejar de lado a los que menos tienen. Porque de este modo se hace posible el crecimiento del Estado, si, a costa de una gran desigualdad injusta entre los ciudadanos, a costa de fuertes ataques a la naturaleza y una gran lista de "a costa de...".
¿De verdad no es necesario añadir sentimientos a la economía cuando es ella misma la que juega con los sentimientos?

jueves, 15 de enero de 2015

Multinacionales

Multinacionales

Estamos destruyendo empleo, estamos destruyendo la economía local estamos enriqueciendo multinacionales, que lejos de repartir esos beneficios entre sus empleados les pagan muy poco, los tienen con contratos precarios y a la mínima que pueden los despiden. Siendo sustituidos por maquinas o nos convencen a nosotros mismos, los clientes, para que hagamos esos trabajos que estaban haciendo ellos y además gratis!
Como es el caso de McDonald, Ikea o Burger King donde nosotros mismos tenemos que recoger nuestras propias bandejas montar los muebles.En las gasolineras donde antes te llenaban el depósito ahora tenemos que ser nosotros los que realizamos la tarea, o casos tan extremos como las nuevas máquinas de los supermercados donde nosotros somos los que nos cobramos, destruyendo así empleo de cajeros. Uno puede pensar, y ya que se ahorran esos puestos van a bajar el precio de la gasolina?  O el precio de los alimentos?
NO! sigue costando lo mismo.
Por eso tenemos que tener en cuenta que cada vez que gastamos dinero estamos creando un modelo de sociedad.

En mi opinión es de gran importancia proteger la economía local, las empresas grandes locales ya compran suficientes productos y servicios en el extranjero, no creo que sea necesario hacer lo mismo a nivel personal.

Mikel Larrazabal

miércoles, 14 de enero de 2015

Culto al dinero



 Vivimos en un mundo en el que manda el capital. Se prioriza el dinero antes que las cosas materiales, y las cosas materiales antes que las personas y valores humanos. La sociedad envidia a los futbolistas, cantantes, celebrities… No por quienes son, que valores tienen o como han logrado sus metas (en el caso de muchas celebrities son lo que son por ser hijos de quien sean…), si no por el numero de ceros que tienen en sus cuentas.

En infinidad de casos esa cantidad de ceros no representa el esfuerzo que se ha hecho para conseguirlo. Y es que es eso exactamente lo que hemos olvidado, el dinero no es más que la recompensa de un trabajo o un esfuerzo. Como mencione en mi anterior entrada Zanahorias y patatas: “el dinero únicamente es un simbolismo que utilizamos para intercambiar bienes”. Es decir, el dinero en un principio era el simbolismo del esfuerzo realizado. Pero ya no es así. No hay que mirar muy lejos, basta con mirar los ricos de este país para darse cuenta que el esfuerzo realizado y la riqueza en estos momentos son inversamente proporcionales. Las personas que más se esfuerzan para sacar a sus familias adelante son las que menos poder adquisitivo tienen. No sé cómo se ha llegado a este extremo, lo que sé es que la economía actual nos ha llevado a deshumanizar a la sociedad.

Existen modelos económicos que intentan cambiar esto y, aun que actualmente parezca contradictorio, compatibilizan lo económico con lo social, es más, priorizan el fin social al capital. Se trata de la Economía Social. Los valores de la economía social se pueden recoger en estos 7 puntos:

1.        Primacía de las personas sobre el capital.
2.        Aplicación de resultados orientados al desarrollo sostenible, a las personas que conforman las organizaciones y a sus entornos inmediatos.
3.        Desarrollo del conocimiento y de las competencias.
4.        Capacidad de autogestión, democracia interna e independencia con respecto a los poderes públicos.
5.        Promoción de la igualdad.
6.         Desarrollo y fomento de la cooperación.
7.        Responsabilidad y compromiso interno y hacia la sociedad y el medio-ambiente.

En definitiva la finalidad de la economía social es solucionar cuestiones sociales que ni las empresas públicas ni las privadas resolvieron satisfactoriamente.

Creo que este puede ser un modelo económico muy interesante, quizás no para las grandes empresas, pues les ha ido bien hasta ahora, pero si para el resto de la sociedad, que somos la mayoría y, en definitiva, los que verdaderamente importamos.

Adjunto un vídeo en el que se puede ver el tipo de personas que ha creado la economía actual. Personas sin ningún tipo de moral ni valores, que lo único que hacen es infectar esta sociedad:

lunes, 12 de enero de 2015

Zanahorias y patatas.

En uno de los temas que estudiamos en clase surgió el debate de los países comunistas y los capitalistas. Me resultó curioso escuchar que un país por sí solo no podía crear riqueza. Si el país era auto-suficiente sí que podía subsistir, pero no crear riqueza.

Al escuchar esto me surgió una gran duda. ¿Por qué si un país por sí mismo no puede crear riqueza, un conjunto de países si puede? Ya que somos estudiantes de ciencias, lo plantearé desde el punto de vista matemático. Digamos que tenemos 3 países: A, B y C. Si ninguno de los países por sí solo puede crear riqueza, su nivel de riqueza será 0: A=B=C=0. Pero resulta que en el mundo que vivimos si hay países ricos. Por lo tanto si el nivel de riqueza de un país es, por ejemplo, A=1, la suma del resto de países tendrá que ser =-1, para que la suma total de ellos sea =0. Todo esto ocurre teniendo en cuenta que un país por sí solo no puede generar riqueza, por lo que yo entiendo que dos, tres o x países juntos tampoco podrán generarla, podrán intercambiar bienes (con dinero). Por ello la única conclusión que saco es que para que un país sea más rico, otro u otros países tienen que empobrecerse.

Aquí vendría el dilema moral que se debería plantear a la sociedad actual: todos queremos ser más ricos, pero no nos damos cuenta de que con ello otro será más pobre.

Además no debemos olvidar que el dinero únicamente es un simbolismo que utilizamos para intercambiar bienes. Es absurdo crear un mundo riquísimo (hablando en términos monetarios) cuando la riqueza de la tierra es la que es. Me explico, si la tierra me da 5 zanahorias y 7 patatas, por más que tenga 6, 7, 8… billetes más, la tierra no va a darme más zanahorias ni patatas.


Por último decir que es muy probable que me haya equivocado en alguna cosa, pero es que mis conocimientos sobre economía son los que son.